To hell with circumstances; I create opportunities. Bruce Lee.
Una de las preocupaciones que me suelen manifestar en mis clases los más jóvenes (alumnos universitarios o recién egresados) es que en el mercado laboral piden experiencia para un determinado puesto, pero no se puede tener experiencia si primero no te contratan y te dan una oportunidad. Es la pescadilla que se muerde la cola. Experiencia que, por cierto, no se puede adquirir en un MBA, sino trabajando.
¿Y cuál es el problema?
El problema es que estás esperando a que tu problema te lo resuelva otro.
Estás pidiendo que otro te de la oportunidad de adquirir experiencia para poder tenerla y hacerla valer junto con tu formación. ¿Por qué alguien iba a querer hacer eso? ¿Por qué alguien tendría que hacer eso?
Hay dos errores aquí:
1.- Nadie te debe nada, ¿por qué iba a debértelo? (piénsalo), sin embargo, tú estás pidiendo, con un cierto sentido de apelar a la justicia, que te den la oportunidad. Eso equivale a que alguien te debe una oportunidad. Nadie te debe nada.
2.- No estás asumiendo la responsabilidad sobre tu propia carrera profesional, sino que la estás delegando en las manos de otro, el que te debería dar la oportunidad. Mal enfoque. El responsable deberías querer desesperadamente ser tú y no estar cómodo con depender de que otro te tire una moneda y te de cualquier oportunidad.
Y entonces ¿qué hago?
Crear tus oportunidades. Coge la situación de tu mano, la pones bajo tu responsabilidad, entiendes que el mundo no te debe nada y ahora estás a cargo tú de procurarte lo necesario para abrirte paso en el mundo profesional:
¿Conocimientos? Has estado estudiando, los tienes o los vas a tener. Los básicos para arrancar. Suficiente. Seguirás aprendiendo siempre (espero).
¿Experiencia? La creas. ¿Cómo? Idealmente mientras estudias, pero si ya has terminado vale igualmente.
Buscas qué empresas pueden aportarte el tipo de experiencia que te interesa (o experiencias, porque siendo joven tu coste de oportunidad es muy bajo y puedes probar varias cosas con cero riesgo). Contacta con ellas y diles que lo que te interesa es aprender y pregúntales cómo puedes colaborar con ellos.
¿Así de simple? Así de simple. Ahora es simple porque el owner, el responsable, eres tú. Antes estabas pidiendo. Ahora te estás moviendo. Diferente, ¿no?
¿Y el dinero? Si puedes sacar 50K brutos anuales de esas primeras interacciones tienes un prometedor futuro como comercial pero, si no fuera el caso, el dinero en esos momentos es secundario. Vas a capitalizarte de experiencia, que es justo tu objetivo, no a ganar dinero. Estás creando capital intelectual en forma de experiencia.
Cuando tienes capital y lo inviertes bien consigues rentabilidad, que serán tus salarios futuros mejorados. Sencillo.
Si crees que tu objetivo cuando eres estudiante o recién egresado es maximizar salario, déjame que te diga que es un objetivo cortoplacista que va en contra de tu medio plazo. Tu objetivo debe ser mejorarte, aprender y crecer como profesional. Eso marcará la diferencia en los siguientes cinco años de tu carrera. No los 200 € brutos más al mes que puedas arañar al empezar.
OK, lo he intentado, he contactado a decenas de empresas y ninguna me quiere como colaborador de ningún tipo. Fin del plan.
No.
Inténtalo desde más abajo, con trabajos más fáciles para que te den la oportunidad.
Pero si no he estudiado sobre esto…
Da igual, empieza por algo, necesitas poner la rueda en marcha y que una cosa lleve a la otra.
OK… aún así no funciona. Fin del plan.
No.
Empieza a ofrecer servicios por tu propia cuenta. Sólo o colaborando con profesionales más experimentados de los que puedas aprender. Me da igual. Pero ponte en el mercado, exponte a él y empieza a caminar.
Vuelve a estar en tu mano. Si no ofreces servicios (puedes hacerlo como autónomo, no te digo que montes una empresa) es porque no quieres. Depende 100% de ti.
¿Tienes poca experiencia para hacerlo sólo? Busca colaboradores.
¿No crees que estés preparado para cobrar aún por tus servicios por la calidad que vas a ofrecer? Hazlo saber a los potenciales clientes y propón tarifas que simplemente no se puedan rechazar.
Otra vez: tu objetivo no es maximizar ingresos, es capitalizarte de experiencia y conocimiento práctico.
Si todo esto te parece difícil esa es otra cuestión. Pero lo que es un hecho incuestionable es que si empiezas a hacer esto en tu segundo año de estudios cuando acabes tendrás dos o tres años de experiencia y entonces, sorpresa: ya no tendrás cero experiencia cuando aspires a un determinado puesto de trabajo.
¿Quién ha creado esa experiencia? Tú. No esperaste a que nadie lo hiciera por ti. Por esa misma razón tu experiencia tendrá varios matices que serán muy valiosos en tu carrera profesional en el medio plazo.
Esto es más fácil de decir que de hacer, ya lo se. Por eso poca gente lo hace. Si fuera fácil lo haría todo el mundo.
Puedes elegir el camino de que el Cosmos te debe una oportunidad o puedes crearla tú. Es tu elección. Ya no puedes decir que no tienes opciones.
If you want to make a movie, make it. Don’t wait for a grant, don’t wait for the perfect circumstances, just make it. Quentin Tarantino.
Quentin Tarantino es uno de los mejores guionistas y directores de cine del mundo. Posiblemente de la historia. Empezó en 1984 escribiendo guiones e intentando dirigir. Nadie le daba una oportunidad porque nadie le debía nada, aunque tuviera un gran talento.
Siguió escribiendo guiones y viendo como nadie los quería. En 1990, seis años después de intentar entrar en el mundo del cine, logra que le paguen por primera vez por escribir un guión: 1.500 $ por From Dusk Till Dawn. Le pagaron, pero no se hizo la película.
Siguió escribiendo guiones, entre ellos True Romance y Natural Born Killers. Nadie los producía. Una de las cartas de rechazo del guión de True Romance decía:
How dare you send me this f… piece of shit? You must be out of your f… mind. You want to know how I feel about it? Here is your f… piece of shit back. F… you. Ejecutivo anónimo de Hollywood que perdió su oportunidad.
Tras un año circulando, True Romance se vende para una película de 30 MM $ de presupuesto. A Tarantino le pagan 50K $ (sí, sólo 50K de 30 MM). Con esos 50K, Tarantino decide que va a escribir el guión de una película tan simple de rodar que podrá rodarla con su propio dinero.
En menos de un mes escribió Reservoir Dogs y la planificó para rodarla en un solo plató (un almacén) casi en su totalidad. La idea era simple: si nadie quiere financiar la película y dejar que la dirigiera, la financiaría él como película independiente con su propio dinero y la dirigiría.
Trabajándose mucho el networking y haciendo pitchs de su guión como el fundador de una startup consigue interés para levantar 1,3 MM $. En 1991 se rueda Reservoir Dogs. Consigue dirigirla él, lo cual era su verdadera ambición y era lo que nadie quería dejarle hacer porque era un desconocido y significaba demasiado riesgo.
Tarantino pudo negociar dirigir la película con una posición de relativa fuerza porque sabía que iba a hacer su película con su propio dinero y ya no dependía de nadie. No estaba desesperado.
Primera ley de las negociaciones: intenta construirte una situación en la que no estés desesperado.
¿Qué hizo Tarantino durante nada menos que siete años? Crearse su propia oportunidad. Nadie le iba a dejar dirigir, así que se puso en una posición desde la que poder hacerlo. Primero creando guiones sin cobrar por ellos (sí), perseverando y mejorando en su arte, luego consiguiendo su primera venta (que tardó más de un año) y luego dispuesto a arriesgar todo su dinero para poder dirigir su propia película. Digamos que no le vinieron a buscar a su casa para dirigir.
Asumió la responsabilidad de crearse su propia oportunidad, a pesar del inmenso talento con el que contaba y que nadie le reconocía, y no se conformó con que le dieran una oportunidad. Mejor, porque no se la iban a dar.
A partir de ese momento todo fue rodado. Se estrena True Romance, dirigida por Tony Scott, y es un éxito de taquilla. Oliver Stone dirige Natural Born Killers. Ahora todo el mundo quiere los guiones olvidados de Tarantino. Se estrena Pulp Fiction en 1994 y se convierte en la mayor estrella de cine del mundo como director. No hay un anuncio en la TV sin la banda sonora de Pulp Fiction.
Hasta su antiguo guión ignorado y nunca producido por el que le pagaron 1.500 $ sale ahora a la luz y se convierte en película con él como actor. La gamberrada de From Dusk Till Dawn. La productora exigió que estuviera como actor porque era tan famoso como director que su nombre tenía que salir en los títulos de crédito. George Clooney y Tarantino en los papeles protagonistas. Quién se lo iba a decir. La dirigió su amigo Robert Rodríguez.
Tarantino ha seguido construyendo su legado como uno de los mejores directores de cine del mundo. Pero nadie le dio una oportunidad, por mucho talento que tuviera y por muy admirado que sea ahora por todos.
La creó él.
Hizo su responsabilidad conseguirse la oportunidad.
¿Qué te parece a ti que debes hacer con tus oportunidades?
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José Fortes – La Forja.
josefortes@substack.com